18 de febrero de 2015
Sin Embargo
La Procuraduría General de la República (PGR) informó que de los 235 desaparecidos en Guerrero, que registró a partir del ataque contra normalistas de Ayotzinapa, 110 casos (o el 46.8 por ciento) ocurrieron en Iguala entre 2012 y 2014, periodo en el que gobernó como Alcalde José Luis Abarca Velázquez.
Las estadísticas indican que el 89.4 por ciento de las víctimas son hombres y el 10.6 son mujeres.
El informe es parte de la propuesta de trabajo ministerial, pericial y de víctimas que la Subprocuraduría de Derechos Humanos, Prevención del Delito y Servicios a la Comunidad de la PGR presentó ayer a los familiares de víctimas de desaparición forzada en Iguala, de la cual El Sur tiene una copia.
De los 235 casos de desaparición forzada que tiene registro la PGR, la mayoría fueron entre el año 2000 al 2014 según las denuncias de los familiares de las víctimas, las cuales salieron a la luz pública en Iguala tras los ataques del 26 y 27 de septiembre, cuando 43 normalistas fueron desaparecidos por policías.
El mayor registro de desapariciones se da entre 2012 y 2014 con 154 casos que representan el 65.5 por ciento, principalmente en Iguala durante la administración del perredista José Luis Abarca Velázquez, preso en el penal de alta seguridad de El Altiplano por delitos de narcotráfico, delincuencia organizada y lavado de dinero.
Entre el 2000 y el 2001 hay dos casos, uno por año, de 2003 a 2006 no hay registro de personas desaparecidas y en 2007 se contabilizaron tres casos, según los testimonios que los familiares de las víctimas dieron a la PGR.
Del 2008 existen cinco denuncias, en 2009 13, en 2010 hubo un repunte a 15 y en el 2011 se reportaron siete víctimas de desaparición.
Según las estadísticas de la PGR, basadas en la información proporcionada por los familiares de víctimas de desaparición, 32 casos se registraron en 2012, cifra que fue superada por más del doble en 2013 con 79 desapariciones forzadas y 43 casos más en 2014, los casos registrados en estos tres últimos años representan el 65.5 por ciento del total denunciado por los familiares de desaparecidos.
De estos casos, hay 36 de los cuales no se reportaron fechas de desaparición de los familiares, por lo que no fueron incluidos en un año específico.
Según el informe presentado por PGR el mayor número de desapariciones se registró en Iguala con 110 casos que representan el 46.8 por ciento de las víctimas, le sigue Cocula con 13, que representa el 5.5 por ciento, Taxco con 12 reportes que son el 5.1 por ciento, y Teloloapan con ocho casos que representa el 3.4 por ciento.
En la estadística aparecen 48 denuncias pero los familiares no saben en dónde fueron desaparecidas las víctimas, esa cifra representa el 20.4 por ciento y 44 casos de otras víctimas que desaparecieron en otros municipios del estado, los cuales no se precisan, pero es el 18.7 por ciento.
También han amenazado a agentes de la PGR
La subprocuradora de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Eliana García Laguna dijo que agentes federales del equipo de búsqueda de fosas también recibieron amenazas de presuntos miembros de la delincuencia, y que ha habido persecuciones en las inmediaciones del paraje La Laguna, donde exhuman restos humanos.
La funcionaria de la PGR dio declaraciones a reporteros la tarde del 20 de enero después de una reunión con familiares de víctimas de desaparición forzada (quienes denunciaron el hostigamiento del crimen), en la parroquia de San Gerardo, donde recordó que hasta entonces habían sido exhumados 37 cuerpos de fosas clandestinas.
Ante la información que difundieron familiares de víctimas de desaparición de que los trabajos de búsqueda y excavación de fosas clandestinas se suspendían esa semana ante la falta de seguridad, la funcionaria dijo que harán una búsqueda programada, organizada y con garantías de seguridad a partir de un proyecto que presentó a los familiares.
Mencionó que ante la información de que la Gendarmería Nacional ya no prestará seguridad al equipo de búsqueda y según se enfocará en la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa, y por el reacomodo que hay en la Secretaría de Marina, ambas corporaciones no les podrían brindar seguridad en esa semana y la segunda lo haría días después.
García Laguna informó que solicitó el apoyo de la Policía Federal Ministerial para que den seguridad al equipo de búsqueda.
Declaró que para la PGR no sólo es importante recuperar los cuerpos de las fosas, sino avanzar en la identificación de las víctimas y la búsqueda de personas con vida, lo cual se hará en hospitales y reclusorios, para lo que harían el cruce de información con diferentes dependencias, "buscar personas desaparecidas no es estar buscando en fosas clandestinas solamente", indicó.
Ante la pregunta de las amenazas que han recibido algunos familiares de víctimas de desaparición por presuntos miembros de la delincuencia, la subprocuradora afirmó que, "también los peritos de PGR han recibido amenazas, hay una situación en la zona que es conflictiva y no solamente han recibido amenazas, ha habido incluso persecución de grupos y permanentemente hay halcones que están en la zona", dijo la funcionaria al referirse al cerro Gordo, al poniente de Iguala donde han sido halladas las fosas.
Mencionó que las amenazas han sido hacia los peritos para que ya no suban ni busquen fosas clandestinas.
Por separado un integrante de la comisión de búsqueda de los familiares confirmó que han visto halcones en la zona de búsqueda y excavación de fosas, y que incluso efectivos de la Marina han hecho disparos al aire para disuadir a los presuntos delincuentes, quienes se ocultan en los cerros a pesar de la presencia de las fuerzas federales.
La fuente, de la cual se omite su nombre por su seguridad, mencionó que cancelaron la búsqueda de posibles fosas que hacían solos, hasta que el estado o la federación les proporcionen seguridad, "porque ha habido movimientos en el cerro, hubo camionetas que los Marinos detectaron y los corretearon pero no los alcanzaron".
Eliana García detalló que entre los cuerpos recuperados de las fosas fue hallado uno que tenía una sonda, ante lo que estimó que fue una persona que sacaron de un hospital. Ahora se sabe que el cadáver corresponde a un vecino de Teloloapan.
Sin Embargo
Las estadísticas indican que el 89.4 por ciento de las víctimas son hombres y el 10.6 son mujeres.
El informe es parte de la propuesta de trabajo ministerial, pericial y de víctimas que la Subprocuraduría de Derechos Humanos, Prevención del Delito y Servicios a la Comunidad de la PGR presentó ayer a los familiares de víctimas de desaparición forzada en Iguala, de la cual El Sur tiene una copia.
De los 235 casos de desaparición forzada que tiene registro la PGR, la mayoría fueron entre el año 2000 al 2014 según las denuncias de los familiares de las víctimas, las cuales salieron a la luz pública en Iguala tras los ataques del 26 y 27 de septiembre, cuando 43 normalistas fueron desaparecidos por policías.
El mayor registro de desapariciones se da entre 2012 y 2014 con 154 casos que representan el 65.5 por ciento, principalmente en Iguala durante la administración del perredista José Luis Abarca Velázquez, preso en el penal de alta seguridad de El Altiplano por delitos de narcotráfico, delincuencia organizada y lavado de dinero.
Entre el 2000 y el 2001 hay dos casos, uno por año, de 2003 a 2006 no hay registro de personas desaparecidas y en 2007 se contabilizaron tres casos, según los testimonios que los familiares de las víctimas dieron a la PGR.
Del 2008 existen cinco denuncias, en 2009 13, en 2010 hubo un repunte a 15 y en el 2011 se reportaron siete víctimas de desaparición.
Según las estadísticas de la PGR, basadas en la información proporcionada por los familiares de víctimas de desaparición, 32 casos se registraron en 2012, cifra que fue superada por más del doble en 2013 con 79 desapariciones forzadas y 43 casos más en 2014, los casos registrados en estos tres últimos años representan el 65.5 por ciento del total denunciado por los familiares de desaparecidos.
De estos casos, hay 36 de los cuales no se reportaron fechas de desaparición de los familiares, por lo que no fueron incluidos en un año específico.
Según el informe presentado por PGR el mayor número de desapariciones se registró en Iguala con 110 casos que representan el 46.8 por ciento de las víctimas, le sigue Cocula con 13, que representa el 5.5 por ciento, Taxco con 12 reportes que son el 5.1 por ciento, y Teloloapan con ocho casos que representa el 3.4 por ciento.
En la estadística aparecen 48 denuncias pero los familiares no saben en dónde fueron desaparecidas las víctimas, esa cifra representa el 20.4 por ciento y 44 casos de otras víctimas que desaparecieron en otros municipios del estado, los cuales no se precisan, pero es el 18.7 por ciento.
También han amenazado a agentes de la PGR
La subprocuradora de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Eliana García Laguna dijo que agentes federales del equipo de búsqueda de fosas también recibieron amenazas de presuntos miembros de la delincuencia, y que ha habido persecuciones en las inmediaciones del paraje La Laguna, donde exhuman restos humanos.
La funcionaria de la PGR dio declaraciones a reporteros la tarde del 20 de enero después de una reunión con familiares de víctimas de desaparición forzada (quienes denunciaron el hostigamiento del crimen), en la parroquia de San Gerardo, donde recordó que hasta entonces habían sido exhumados 37 cuerpos de fosas clandestinas.
Ante la información que difundieron familiares de víctimas de desaparición de que los trabajos de búsqueda y excavación de fosas clandestinas se suspendían esa semana ante la falta de seguridad, la funcionaria dijo que harán una búsqueda programada, organizada y con garantías de seguridad a partir de un proyecto que presentó a los familiares.
Mencionó que ante la información de que la Gendarmería Nacional ya no prestará seguridad al equipo de búsqueda y según se enfocará en la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa, y por el reacomodo que hay en la Secretaría de Marina, ambas corporaciones no les podrían brindar seguridad en esa semana y la segunda lo haría días después.
García Laguna informó que solicitó el apoyo de la Policía Federal Ministerial para que den seguridad al equipo de búsqueda.
Declaró que para la PGR no sólo es importante recuperar los cuerpos de las fosas, sino avanzar en la identificación de las víctimas y la búsqueda de personas con vida, lo cual se hará en hospitales y reclusorios, para lo que harían el cruce de información con diferentes dependencias, "buscar personas desaparecidas no es estar buscando en fosas clandestinas solamente", indicó.
Ante la pregunta de las amenazas que han recibido algunos familiares de víctimas de desaparición por presuntos miembros de la delincuencia, la subprocuradora afirmó que, "también los peritos de PGR han recibido amenazas, hay una situación en la zona que es conflictiva y no solamente han recibido amenazas, ha habido incluso persecución de grupos y permanentemente hay halcones que están en la zona", dijo la funcionaria al referirse al cerro Gordo, al poniente de Iguala donde han sido halladas las fosas.
Mencionó que las amenazas han sido hacia los peritos para que ya no suban ni busquen fosas clandestinas.
Por separado un integrante de la comisión de búsqueda de los familiares confirmó que han visto halcones en la zona de búsqueda y excavación de fosas, y que incluso efectivos de la Marina han hecho disparos al aire para disuadir a los presuntos delincuentes, quienes se ocultan en los cerros a pesar de la presencia de las fuerzas federales.
La fuente, de la cual se omite su nombre por su seguridad, mencionó que cancelaron la búsqueda de posibles fosas que hacían solos, hasta que el estado o la federación les proporcionen seguridad, "porque ha habido movimientos en el cerro, hubo camionetas que los Marinos detectaron y los corretearon pero no los alcanzaron".
Eliana García detalló que entre los cuerpos recuperados de las fosas fue hallado uno que tenía una sonda, ante lo que estimó que fue una persona que sacaron de un hospital. Ahora se sabe que el cadáver corresponde a un vecino de Teloloapan.
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